En la actualidad, la inteligencia artificial (IA) se ha convertido en una de las tecnologías más prometedoras y en constante evolución. Sin embargo, existe una preocupación creciente sobre el papel de las mujeres en este campo y los posibles efectos negativos que la falta de representación femenina puede tener en el desarrollo de la IA. Expertas en inteligencia artificial de la Universidad Rey Juan Carlos (URJC) han solicitado una mayor inclusión de mujeres en los equipos que trabajan en esta tecnología, argumentando que si no se toman medidas, la brecha de género podría ampliarse y perpetuar la discriminación estructural.
La necesidad de posicionar a las mujeres en la IA
Durante su intervención en el Congreso Internacional “Justicia Social, Desarrollo Sostenible y Mujer”, la profesora de la URJC, María Pérez Ugena-Corominas, hizo un llamado para posicionar a las mujeres en empleos, educación, innovación y todos los ámbitos relacionados con la inteligencia artificial. Según Ugena-Corominas, el índice de mujeres presentes en el campo de la IA es mínimo, lo que implica que las perspectivas femeninas no se están teniendo en cuenta en el desarrollo de estos sistemas.
La quinta edición de este congreso, organizado por la profesora Inmaculada Sánchez Barrios en la Unidad de Igualdad de la Universidad de Salamanca, incluyó un debate sobre cómo la inteligencia artificial puede afectar a la desigualdad de género. Las profesoras de la URJC, Pérez Ugena-Corominas y Ana Felicitas Muñoz Pérez, expusieron los retos y peligros que pueden surgir si no se presta suficiente atención a la igualdad de género en el desarrollo de la inteligencia artificial.
Riesgos de la IA para la igualdad de género
La profesora Muñoz alertó sobre los riesgos que la inteligencia artificial puede representar para los derechos humanos, la seguridad, la justicia, la privacidad y, especialmente, para la equidad de género. Según Muñoz, la perspectiva de género es fundamental, ya que a medida que la tecnología avanza, las organizaciones de protección y defensa de las mujeres se están quedando rezagadas, lo que resulta en una discriminación estructural directa e indirecta. La discriminación estructural es particularmente peligrosa, ya que se produce de manera inadvertida.
Como ejemplo de sesgos presentes en la inteligencia artificial, Ugena-Corominas mencionó que los sistemas de IA a menudo muestran imágenes en las que los surfistas son hombres y las mujeres están en la cocina. Según las expertas, el enfoque debe centrarse en los algoritmos, ya que en muchos casos son cajas negras que recopilan datos opacos. Los datos introducidos en estos algoritmos están sesgados debido a la discriminación estructural existente en la sociedad. Por lo tanto, es necesario promover la transparencia en los sistemas y garantizar que los datos recopilados sean representativos y libres de sesgos.
La IA como herramienta para proteger los derechos de las mujeres
En el evento “El papel de las mujeres en el futuro de Europa”, celebrado en colaboración con Huawei, las expertas reunidas coincidieron en que la inteligencia artificial desempeña un papel central en la protección de los derechos de las mujeres. Sin embargo, también señalaron que los algoritmos pueden intensificar las brechas sociales existentes, como las de género. Para evitar sesgos discriminatorios que amplifiquen estas brechas, es fundamental incorporar a más mujeres en el desarrollo de algoritmos de IA.
Cecilia Danesi, profesora de la Universidad de Salamanca e investigadora en IA, destacó que la tecnología puede tener sesgos similares a los de las personas, ya que es construida por seres humanos. Por lo tanto, es importante contar con una IA que incluya a mujeres y promueva la diversidad y una perspectiva ética basada en los derechos humanos. Este enfoque debe basarse en la prevención en lugar de en las sanciones. En este sentido, la Ley de inteligencia artificial europea se mencionó como un ejemplo de excelencia en el desarrollo de una IA ética.
Avances y desafíos en la inclusión de mujeres en el sector tecnológico
Tamara Tafra, asesora ministerial para asuntos cibernéticos y desinformación de la Representación Permanente de Croacia en la Unión Europea, señaló que si bien ha habido progresos en la apertura del sector tecnológico a las mujeres, aún queda mucho por hacer. Tafra destacó que en el pasado, la tecnología era un área dominada por hombres, pero ahora hay algunas mujeres en posiciones de poder. Sin embargo, aún hay una falta de representación significativa en comparación con las generaciones anteriores.
Es crucial que las mujeres tengan una mayor presencia y participación en los equipos de inteligencia artificial. La falta de representación femenina en este campo puede ampliar la brecha de género y perpetuar la discriminación estructural. La perspectiva de género es esencial para garantizar que los sistemas de IA sean equitativos y no reproduzcan los sesgos y estereotipos existentes en la sociedad. La inclusión de mujeres en el desarrollo de algoritmos de IA es fundamental para evitar sesgos discriminatorios y promover una sociedad más justa y equitativa.